TODOS TENEMOS MIEDO

Ser humano y no tener miedos es incompatible. Todo aquel que me diga que nunca tuvo miedo a nada miente, no es por descalificar, y es que o trata de mentirme a mí o se miente a sí mismo intentando sentir menos miedo por no nombrarlo.

A mí me da miedo siempre perder lo que tengo, aunque con el tiempo he aprendido a aprovechar el momento y sacar lo mejor de lo que se me ofrece y yo misma ofrezco sin pensar en ¿Qué pasará si en un mañana esto ya o existe? de todos modos, es algo que en momentos de mucha fuerza emocional me llega, y da miedo (no el suficiente como para sustituir las emociones positivas...no eclipsa nada en absoluto)

Muchas veces siento el miedo a resultar la débil de una determinada situación pero....¿Qué es ser el débil? Mostrar los sentimientos abiertamente, ser atento y cariñoso, estar cuando te necesiten... no es ser débil, es mostrarte como eres y cómo te sientes con alguien que seguramente se lo merezca y te responda con la misma apertura.

Y en días como estos, en los que mis fantasmas sobrevuelan a mediana distancia y quiero hacerlos marchar he descubierto que mi empeño por darles la patada solo hace que yo me acerque a ellos con el afán de dársela, tengo que dejarles revolotear semi lejos... dejando que las corrientes de aire se los lleven a otro mundo... ese en el que yo ya no soy una persona que les tiene miedo...

Todos tenemos miedos, y si nos parásemos a analizarlos veríamos que no tienen sentido la gran mayoría... pero seguiríamos sintiéndolo, porque el miedo es irracional. Eso sí, analizándolo y poniéndole a las cosas la importancia real que tienen, aún sintiendo miedo no dejamos que nos limite...simplemente es una dificultad sobre la que saltar. En muchas ocasiones hay que ponerle barreras... sino es él quien nos limita.